Aunque tengan las mismas iniciales y que tengan que ver con el mismo origen, se trata de dos concepciones de militancia que se fueron distanciando con el correr de los años y con los distintos posicionamientos de las personas que lo conformaban y los siguen conformando. Podríamos decir que en algún punto son opuestos.
La Juventud Peronista tuvo en nuestra historia un protagonismo que el poder de facto militar y el poder de facto infiltrado en el Partido Justicialista, como lo fue la triple A, se encargaron de acallar a fuerza de plomo.
Que distinta hubiese sido la historia de nuestro país si en esos tiempos los argentinos que tenían el poder de las armas hubiesen pensado en nacional y no respondiendo a los intereses de sus patrones europeos.
Desde el año 2003 y después de haber atravesado nuestro pueblo, la peor crisis social de su historia, algo por lo que dejaron su vida muchos militantes de la JP, se empezó a convertir en realidad. Hasta parte de la marcha se hizo realidad en la parte que dice …combatiendo al capital…combatiéndolo con la redistribución que implica cancelar la transferencia de dinero al extranjero que eran las AFJP, generando nuevos puestos de trabajo, plantándose al supuesto acreedor negándose a pagar una deuda mal habida, dándole fuerza al sindicalismo para que defienda los intereses de los trabajadores, luchando contra los monopolios de la información para cambiar una herramienta de dominación que tiene el enemigo de todos los pueblos del mundo.
Por suerte y a pesar de una oposición muy apoyada en intereses foráneos, la lucha sigue dándose día a día.
Estas cosas que menciono son las que me llevan a pensar que muchos luchadores sociales de antes y de ahora, de la JP o de la mejor Izquierda Argentina, se deben sentir orgullosos, no conformes paro si orgullosos, porque este proceso es el fruto de sus luchas y sus muertes.
Pero ahora, como antes, el enemigo está al acecho, está en la oposición y está en el PJ por más que lo quieran vestir de JP.
Hoy para el que escribe, la JP vive en los movimientos sociales, en los sindicatos de base, en las luchas callejeras por los puestos de trabajo.
El gobierno lo sabe, solo tiene que definirse y enfrentar al PJ desde afuera porque desde adentro, el PJ ya demostró en la ultima elección que lo puede boicotear.
El resto de la oposición son solo eso resto, como el voto de cobos, no positivo.
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