viernes, 30 de enero de 2015

Dime con quien andas y te dire si te pueden suicidar

 Jueves, 15 de enero de 2015

Las relaciones con Estados Unidos
Nisman en Wikileaks

Por Raúl Kollmann

A lo largo de los años, el fiscal Alberto Nisman no hizo más que dejar rastros de su alineamiento con Estados Unidos. En la colección de cables de la embajada norteamericana en Buenos Aires, dados a conocer por Wikileaks, hay decenas de informes de visitas de Nisman a la delegación diplomática donde discutía la orientación de la causa, pedía disculpas por no avisar de tal o cual medida que tomó y les enviaba textos que recién después presentaría a la Justicia. Como transcribió este diario el 27 de febrero de 2011, los norteamericanos se mostraron muy enojados: "No hay que orientarse a la pista siria ni a la conexión local. Seguir esas pistas podría debilitar el caso internacional en contra de los acusados iraníes". Las instrucciones al fiscal se las daban desde la Oficina Legal, nombre de fantasía usado en lugar de FBI. Desde ahí le marcaban la cancha.

Cuando terminó el juicio oral por el caso AMIA, con Carlos Telleldín y los policías bonaerenses declarados inocentes, el mismo tribunal ordenó que se investigara a los que sembraron pistas falsas en la investigación que consideraron "un armado al servicio de políticos inescrupulosos". Esto derivó después en el procesamiento, confirmado, del ex juez Juan José Galeano, los ex fiscales, el comisario retirado Jorge "El Fino" Palacios, el titular de la SIDE, Hugo Anzorreguy, varios agentes de la misma secretaría y hasta el titular de la DAIA, Rubén Beraja. Pese a que existía orden del tribunal de investigar, la embajada le insistía a Nisman que no fuera para ese lado, ni para la pista siria, ni para la conexión local. "Eso le da argumentos a los iraníes", escribían en los cables publicados por Wikileaks.

Como relató en este diario el periodista Santiago O'Donnell el 17 de febrero de 2013, hubo 196 cables emitidos por la embajada en los que figuraba la sigla AMIA. O'Donnell transcribe de Wikileaks que en noviembre de 2006 Nisman le adelantó a la embajada que el juez Canicoba Corral procesaría a los sospechosos iraníes. En diciembre 2007, Nisman les presentó un borrador de una orden de captura de dos carillas, pero no les satisfizo a los funcionarios norteamericanos. Dos meses después llevó otro borrador de nueve páginas que sí fue aceptado.

En los cables se deja constancia que Nisman siempre estuvo dispuesto a colaborar, que les anticipaba sus decisiones y que incluso les pidió disculpas varias veces –figura en tres cables– porque en una ocasión no les adelantó una medida que iba a adoptar. Esto ocurrió en mayo de 2008. Los textos dejan en claro que es Nisman el que pide tomar contacto. En noviembre de ese mismo año, le anticipa a la embajada que accionará civilmente contra los iraníes. En mayo de 2009, Nisman llamó a la delegación diplomática para anticiparles que iba a pedir la captura de Samuel Salman El Reda, como una especie de coordinador del atentado.

Mucho antes de eso, en 2005, se produjo un curioso episodio del expediente. Nisman informó que ya tenía el nombre del conductor suicida que se estrelló en la AMIA, Ibrahim Hussein Berro, un joven libanés de 21 años. En uno de sus decenas de viajes a Estados Unidos, Nisman entrevistó a dos hermanos de Berro que vivían en Detroit. Al regreso, el fiscal –asistido por funcionarios norteamericanos– sostuvo que Abbas y Hassan Berro habían declarado que efectivamente Ibrahim fue el suicida. Pero una lectura de la declaración de los hermanos lleva a la conclusión contraria: dijeron que estaban convencidos que Ibrahim murió en el sur del Líbano. Los hermanos repitieron esto en varias radios argentinas, poniendo en duda lo armado por Nisman y funcionarios norteamericanos. Por supuesto que tampoco se encontró ningún rastro en Migraciones o en cualquier otra instancia de que Ibrahim haya estado por este lado del planeta.

En mayo de 2008 se dio el momento de mayor desazón del entonces embajador Earl Anthony Wayne. En un cable emitido a las 23 horas del 22 de mayo, el representante norteamericano se quejó por el pedido de detención de Carlos Menem y los demás funcionarios por desviar la investigación. "Cuando la oficina de Legales (en verdad el FBI) le hizo notar a Nisman que su anuncio podía llevar otra vez a que el gobierno iraní cuestionase la credibilidad o imparcialidad de la investigación, Nisman dijo que no debería, aunque luego concedió que no había considerado las implicancias que el pedido de detención podría tener en la investigación internacional." Otra cosa que molestaba al embajador: que los medios consideraban a Alberto Kanoore Edul como la punta de la llamada pista siria. Una de las vertientes de la causa del encubrimiento fue que el ciudadano argentino de origen siriolibanés Kanoore Edul le había hecho un llamado a Carlos Telleldín una semana antes del atentado. Telleldín fue quien armó la Trafic, con partes robadas, que estalló en la AMIA. Kanoore Edul nunca pudo explicar esa llamada, por lo que se ordenaron allanamientos en sus domicilios. La medida se demoró a raíz de que el padre de Kanoore Edul, viejo amigo de Carlos Menem, fue a la Casa Rosada a hablar con Munir Menem. Eso retrasó los allanamientos varias horas. Nisman puso en marcha una investigación sobre esos hechos, pero a los norteamericanos no les gustó nada: no querían ni que se acuse a Menem ni a los sirios ni que se buscara la conexión local. Su objetivo eran los iraníes.

En su vínculo con la embajada, Nisman no estaba solo. Su referente en la SI, Jaime Stiuso, representaba a quienes dentro de la secretaría se alineaban con los servicios de inteligencia norteamericanos. Los hombres cercanos a Daniel Scioli sostienen que fueron agentes de Estados Unidos los que filmaron al gobernador en el último viaje a Miami, cuando estuvo con Bill Clinton, y que desde allá le hicieron llegar las imágenes al sector alineado con ellos en la SI. De ese grupo, la filmación pasó a un candidato opositor.

Semejantes maniobras y las operaciones desde la SI, a través de jueces de Comodoro Py, contra el Memorandum también fueron características de los últimos tiempos. Eso puso en marcha la decisión de la Presidenta de hacer un fuerte recambio de toda la cúpula de la SI.

Herido por la pérdida de su referente en la Inteligencia y los fondos que eso significaba, con pocas chances de llevar algo a la embajada, el fiscal pateó ayer el tablero. Tal vez busca convertirse en una víctima y tiene la esperanza de sacarse de encima una causa de cuyos magros avances –como dicen los familiares– es uno de los responsables.

raulkollmann@hotmail.com

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martes, 27 de enero de 2015

Asesinos de la verdad.Enemigos de la Democracia

Durante su discurso, la Presidenta se refirió a Diego Angel Lagomarsino, el empleado de la fiscalía que le entregó el arma al fiscal Alberto Nisman y ayer quedó imputado por ese hecho. CFK dijo que “no solamente es opositor y tiene todo su derecho de serlo, sino que además es el hermano de un importante ejecutivo del estudio Sáenz Valiente, socio del Grupo Clarín. Todos recordarán aquellos cuadros que presentara Martín Sabbatella donde figuran las sociedades compartidas entre Clarín y los Sáenz Valiente, es el gerente de informática del Grupo Clarín”. Ayer, el Grupo Clarín señaló en un comunicado que el hermano de Lagomarsino “jamás trabajó ni tiene vinculación con el Grupo Clarín”.
“La pregunta que me hago es la siguiente –dijo CFK–: si en lugar de que el arma perteneciera al señor Lagomarsino, íntimo amigo del fiscal y miembro de la fiscalía que investiga AMIA, un opositor a este gobierno, y hermano de un importante ejecutivo de las empresas vinculadas con el Grupo Clarín, hubiera sido un fervoroso militante del Frente para la Victoria y además de eso hubiera tenido un hermano con un importantísimo cargo en el Poder Ejecutivo Nacional, ¿qué se estaría diciendo? Por eso realmente todos estos días de un verdadero aquelarre informativo, confusiones que conllevan a desconcertar a la gente y a hacerla indignarse frente a las cosas. Tienen un propósito muy definitorio diría yo, la desinformación, la confusión y fundamentalmente que haya un gran pesimismo frente a la labor que puede cumplir la Justicia.”

viernes, 23 de enero de 2015

El PRO con sus legisladores presionaba a NISMAN

El bloque de Diputados del PRO jugó un papel central para convocar al fiscal especial de la causa AMIA, Natalio Alberto Nisman, a la comisión de Legislación Penal de la Cámara Baja. Una de las principales impulsoras de su comparecencia para amplificar la denuncia que había presentado contra la presidenta Cristina Fernández fue la diputada Patricia Bullrich, una de las legisladoras que más trató de comunicarse con Nisman durante el domingo, según confiaron fuentes cercanas a la causa.
"La Piba" no fue la única integrante del bloque macrista que mantuvo intensos intercambios con el fiscal que apareció muerto ese mismo día con un disparo en la sien que la justicia investiga como "muerte dudosa". La segunda principal impulsora de su asistencia es la diputada Laura Alonso que ayer utilizó sus diálogos con el fiscal para negar que Nisman hubiera regresado al país en forma imprevista. Según la ex directora de la ONG Poder Ciudadano, Nisman había agendado tomarse un café con la diputada esta semana, aunque días antes ya había mantenido una larga reunión en la oficina del funcionario judicial, en una cita a la que luego llegó "La Piba". Esos diálogos fueron publicados por el diario Clarín.
La reunión fue el martes 13 y, según insistió Alonso, en ese encuentro el fiscal les anticipó parte de la denuncia que presentaría al día siguiente y por la cual pediría la habilitación de la feria judicial de verano, aunque la jueza María Romilda Servini de Cubría negó tal posibilidad por considerar la falta de elementos para hacerlo. Un día después de la presentación en Tribunales, otro miembro del PRO que habló con cierta cautela fue el diputado nacional del PRO Sergio Bergman. "Estamos todos conmocionados por la noticia periodística, pero dada la gravedad de su denuncia, entendemos que por el trabajo que él viene realizando debe tener la consistencia de la argumentación", sostuvo en una carta abierta, pero tomó distancia del eje principal de la denuncia. "Con respecto a la hipótesis de un intercambio de impunidad a cambio de un favor económico (granos, petróleo, armas…) estoy convencido de que el hecho de que sea una denuncia de un fiscal nos tiene que poner a todos en la dimensión de ser respetuosos de su trabajo. Puedo imaginar que el fiscal Nisman no llega a hacer esta denuncia si no tiene la corroboración, la documentación y las pruebas para que la Justicia dictamine", escribió con notable sorpresa el rabino, en un curioso anticipo de las dudas que pocos días después se profundizarían respecto al mismo escrito.
Otro miembro del PRO que mantuvo un estrecho contacto con Nisman fue el fiscal federal y ex funcionario Carlos Stornelli que, según explicó el miércoles a la salida de la fiscalía que investiga la "muerte dudosa", dialogó ayer con la prensa y contó que lo había llamado "espontáneamente". "Nos conocíamos desde hace 20 años, no éramos amigos y lo llamé de curiosidad. Somos fiscales federales. Sabemos las cosas y circunstancias por las que pasamos. (Ofrecí) no una ayuda sino una colaboración por si necesitaba tener copia de seguridad de algunas" pruebas, destacó.
Y agregó: "Soy un testigo de los últimos días del doctor Nisman y eso es lo que vine a relatar. Además vi que la doctora iba a indagar sobre los últimos días del doctor con sus llamadas telefónicas y yo sabía que había conversado con él" el viernes pasado, añadió. "Mi percepción es que estaba asustado", opinó Stornelli, ex ministro de Seguridad bonaerense, y designado jefe de Seguridad del Club Boca Juniors por decisión del presidente del club Daniel "Tano" Angelici. «

martes, 6 de enero de 2015

Politicos que arrugan

Capitanich cargó contra "los farsantes de la política" y señaló la necesidad de "defender todos los días, desde la trinchera y la militancia, lo que hemos podido construir" en los últimos diez años. En su habitual conferencia en Casa de Gobierno, el funcionario subrayó la necesidad de "aclarar y contar con todos los datos" para entender la actual situación del país, porque sino "los mentirosos de siempre, que están en las oficinas y dan mensajes a ciertos políticos opositores, terminan instalando sus temas".
“Voy a estar en la trinchera en la militancia activa y en la defensa de este proyecto porque lo siento así y porque tengo la más absoluta y profunda convicción que ha sido la más fenomenal transformación de la Argentina después de Juan Domingo Perón y por eso es necesario defender con actitud, vocación militante y diciendo en la cara lo que es necesario decir”, añadió.
Para el jefe de Gabinete, muchos políticos “sufren la crisis de amedrentamiento y cuando lo empiezan a criticar arrugan y no tienen coraje ni convicción, y a los que cuando lo critican en las tapas de los diarios o en operaciones de prensa en vez de criticar y exponer la verdad se esconden”.
Por eso, subrayó, "es necesario es esbozar con mucha firmeza y claridad conceptual las reglas de comportamiento del sistema político” y remarcó que el hecho de haber expresado ayer que Scioli debe definir si “está de este lado o del otro” es “lo que debe decir cualquier dirigente político que pertenece a este espacio cuando grupos mediáticos concentrados y adalides opositores critican, agravian, injurian, desestabilizan permanentemente al gobierno, y pretenden definitivamente terminar con un gobierno".