domingo, 22 de noviembre de 2009

Dia de la Soberania, publicado en Matemedios

El 20 de noviembre de 1845, en la batalla de Vuelta de Obligado, algo más de un millar de argentinos con profundo amor por su patria enfrentó a la armada más poderosa del mundo, en una gesta histórica que permitió consolidar definitivamente nuestra soberanía nacional.


A pedido del historiador José María Rosa y por medio de la Ley Nº 20.770, se ha instaurado el 20 de noviembre como Día de la Soberanía Nacional, en conmemoración de la batalla de Vuelta de Obligado. Por las condiciones en que se dio esa batalla, por la valentía de los argentinos que participaron en ella y por sus consecuencias, es reconocida como modelo y ejemplo de sacrificio en pos de nuestra soberanía.
Ocurrió en 1845, en un contexto político interno muy complejo y con profundas divisiones, que propiciaron un nuevo intento de dos potencias europeas (Francia e Inglaterra) por colonizar algunas regiones de nuestro país.
Gobernaba Rosas, San Martín lo apoyaba desde su exilio y en todo el país se oyó el deseo de seguir siendo una nación libre y no una colonia extranjera, aun a costa del enorme sacrificio que ello significaría. Si hasta el autor del Himno Nacional, Vicente López y Planes, arengaba a nuestro pueblo ante el avance de las fuerzas anglo-francesas por el Río de la Plata:

"¡Morir antes, heroicos argentinos, que de la libertad caiga este templo.Daremos a la América alto ejemplo que enseñe a defender la libertad!"

El propósito de los invasores era ingresar por el Paraná, a lo que el gobierno argentino se anticipó preparando la resistencia al mando de Lucio Mansilla en un lugar cercano a San Pedro: Vuelta de Obligado. Las fuerzas enemigas superaban ampliamente, en número y en modernidad de su armamento, a las argentinas, que tras 7 horas de lucha fueron desplazadas.
Sin embargo, aunque pudo franquear el paso hacia el Paraná, el enemigo no pudo ocupar las costas (de vital necesidad estratégica), por lo cual su victoria no fue completa. En cambio, se vigorizó el espíritu nacional y desde todo el mundo los mensajes favorecían la defensa de nuestra soberanía, que finalmente resultó reforzada. Para darnos una idea de cuánto significaba la defensa de nuestro suelo para quienes lucharon en aquella batalla, vale mencionar algunas de las emocionantes palabras de Mansilla a su gente antes del combate:

"¡Valientes soldados federales, defensores denodados de la Independencia de la República y de la América!; ahí vienen nuestros enemigos, sostenidos por los codiciosos marinos de Francia e Inglaterra, navegando las aguas del gran Paraná, sobre cuyas costas estamos para privar su navegación bajo de otra bandera que no sea la Nacional... ¡Vedlos camaradas, allí los tenéis!... Considerad el tamaño del insulto que vienen haciendo a la soberanía de nuestra Patria, al navegar un río que corre por el territorio de nuestra República, sin más título que la fuerza con que se creen poderosos. ¡Pero se engañan esos miserables: aquí no lo serán! ¿No es verdad camaradas? ¡Vamos a probarlo! Tremole en el río Paraná y en sus costas el pabellón azul y blanco, y muramos todos antes de verlo bajar de donde flamea."

Muchos de los que escucharon esta arenga no regresaron a su casa. Murieron defendiendo a su patria con un concepto muy claro y muy básico de "soberanía": que el invasor vuelva a su lugar, porque esta tierra es nuestra y de nuestros descendientes. El notable espíritu de resistencia manifestado en Vuelta de Obligado terminó de ratificar nuestra condición de nación libre e independiente, por cuanto aun quienes no simpatizaban con Rosas cayeron en la cuenta de que dejarse conquistar por fuerzas extranjeras no era una salida, y que el pueblo no iba a dejar que ello ocurriera.
El propósito de esta conmemoración, es contribuir a fortalecer el espíritu nacional de los argentinos, y recordar que la Patria se hizo con coraje y heroísmo.

Cada 20 de noviembre rindamos nuestro homenaje a los héroes de Obligado y no perdamos de vista el mensaje que con convicción y heroísmo nos legaron para que nuestra soberanía se extienda y se afiance.
--
Visità nuestro blog:

www.matemedios.blogspot.com


Internet Explorer 8 especial para MSN - ¡Gratis! Descargalo ahora haciendo clic aquí

viernes, 20 de noviembre de 2009

Gestiòn o Indigestiòn

El pronunciado periodismo independiente, siempre rapido de reflejos para criticar cualquier accion del gobierno nacional, al igual que los pronunciados fiscales mediaticos como tinelli, legrand, gimenez, paluch, majul etc, parecen tener adormecidos sus instintos de criticas cuando la situaciòn que se presenta està en la vereda de enfrente, tal vez, perdon por la obviedad, esa sea su vereda.
La indigestiòn en la que se ha transformado la gestiòn del jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, hace visible lo que se pretende ocultar desde los microfonos de los pronunciados como independientes y espirituales.
Es verdad que Macri no colabora con la causa, ya que no para de generar con sus amigos en la gestiòn, un escandalo tras otro.
El ex presidenciable ya tendria , si los pronunciados fueran realmente independientes, paginas enteras de editoriales y programas de radio y televisiòn completos, dedicados a su indigestiòn en la ciudad, pidiendole que deje el cargo, por incapaz. Cargo que alcanzò gracias a los pronunciados como independientes, en una costosa campaña de marketing.
Esto a lo que estamos asistiendo, es el mejor ejemplo de la libertad de prensa que reina en la Argentina, de la cual los monopolios hacen uso y abuso, si algùn politico les hace un guiño.
Todo pasa dijo un filosofo de Sarandi. Por suerte, son tan groseras las acciones del responsable de gobierno porteño que muy pronto, si no mejora, los pronunciados le van a soltar la mano para que no los agarre a ellos, algùn juez de linea que les marque el fuera de juego.

lunes, 16 de noviembre de 2009

Carta abierta a Tinelli

Usted que supo empezar de abajo, viniendo de un pueblo del interior de la provincia de Buenos Aires, a pelearle a la inseguridad de vida, buscando trabajo. Usted que con su esfuerzo pudo ir logrando esa tan ansiada seguridad de vida a la que aspira todo mortal. Usted, bien lo sabe, es un privilegiado. Su esfuerzo y por que no un gran golpe de suerte, que lo catapulto a la fama., hizo que el modesto trabajador se convirtiera en un empresario exitoso. No dudo de su honestidad para alcanzar la fama, pero tampoco dudo de que ese proceso lo ha llevado, aunque se resista a reconocerlo, a alejarse de ese hombre de pueblo, con valores muy profundos, para transformarse en lo que quien quiere ver puede, si no se deja llevar por el juego que proponen sus programas de televisión.
Hoy usted es un empresario con mucho poder económico y además con mucho poder de comunicación social. Tanto poder, mal usado, se transforma en una herramienta que puede causar mucho daño.
Usted que se hizo famoso, cargando a la gente con cámaras ocultas y ahora basa su negocio de lucro, aprovechándose de las necesidades de los que carecen de seguridad de vida. A usted señor, su narcisismo lo ha sesgado, usted se destaca como conductor de un programa tragicómico, pero si en cambio usted se cree capaz de mejorar la condición de vida de sus semejantes, el mejor medio, mal que le pese, es la política y en un estado de derecho como el que vivimos lo puede hacer si cree que tiene capacidades reales.
Usted que es tan creativo, seria deseable, pudiera resignificar el formato que repite noche a noche, por otro donde no se utilice la desgracia o carencia de nuestros hermanos para lucrar con su venerado DIOS RAITING.
Los necesitados, usted lo sabe, tal vez por un plan asistencial van a una marcha, mas aun a un programa de convocatoria masiva como el suyo. Que le digo con esto, que desde la función privada, usted hace lo que critica, sobre una de las peores maneras de hacer política. Usted le vende un sueño a distintos sectores de la comunidad, solo un sueño, logrando la identificación masiva que solo llena sus bolsillos de dinero.
Usted que tiene seguridad de vida, usa todas las carencias de quienes no la tienen, para enriquecerse. Lo suyo hace tiempo que dejo de llamarse trabajo, lo suyo es apropiación de las necesidades del otro para beneficio propio.
Estimado, usted que ahora da clases de ciudadanía , debería saber que la seguridad de vida es mucho mas que la posibilidad de ser asesinado por un tercero, implica también, el acceso al trabajo, a la salud, al techo propio, al alimento, al afecto, a la posibilidad de estudiar, de tener padres con trabajo, de sentirse amado, de sentirse perteneciente, de sentirse que se puede proyectar como persona y con todos esos y otros elementos, aceptar el pacto implícito , mas allá de las leyes, que implica vivir en sociedad y en democracia.
Si aun le queda algo de ese joven que supo ser, lo invito a resignificar su mirada sobre como un hombre poderoso como usted, debe trabajar por los que no tienen seguridad de vida. Tal vez eso implique bajarse del pedestal mediático que hoy le da sentido a sus días.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Unitarios y Federales

Unitarios y Federales

 

LA historia se repite en la confederación hecha Nación. La historia se repite y se repite porque nunca los unitarios de entonces fueron realmente derrotados. Poderosos económicamente como antes, cuando lucharon en contra de la incipiente nación a favor de los intereses comerciales que querían imponer por medio del bloqueo a la política ultra nacional que Rosas no estaba dispuesto a negociar. Esos unitarios que como Lavalle en su momento, por pelear en contra de un federal, se alistó a las ordenes de la corona francesa, por supuesto a cambio de algunos billetes. Unitarios como el general Paz que hoy tiene el honor de rodear a la capital con un avenida, unitarios como Sarmiento que con tal de satisfacer a sus amigos europeos quería que la Argentina fuera hoy solo la pampa húmeda. Esos malditos unitarios siguen vivos y representados. Hoy esos malditos unitarios son los que hablan de federalismo y rodean aun vicepresidente totalmente convertido en marioneta unitaria, esos malditos unitarios son los que a derecha e izquierda de + /- cobos, lo aplauden en una reunión de la cámara de dueños de medios que juegan a querer forzar políticas de estado.

El enemigo de la Argentina sigue siendo el mismo de San Martín, de Rosas, de Perón y mal que les pese por los próceres que acabo de nombrar, también es el enemigo de la actual Presidente Cristina Fernández.

Ese enemigo es el enemigo de todo lo que vaya en dirección nacional, social y popular.

Ese enemigo, al igual que en el 1800 no duda en corromper a pos corrompibles y es por ello que se hace muy peligroso, porque se trata de poderosos intereses extranjeros que nunca se fueron porque siempre estuvieron representados.

No dudaran en utilizar todos los medios para hacer fracasar no a este gobierno, sino a la Argentina, tienen el poder del dinero, el poder de los medios, el poder de la mentira repetida por cansancio y el poder de la generación de inseguridad de vida en la población.

Es muy larga la lista de unitarios que estoy viendo en el aquí y ahora, unitarios que se juntan para defender sus intereses económicos y los de sus patrones. Unitarios que no dudan en decirse federales y republicanos.

Unitarios que hasta tienen a un Cardenal como vocero, cardenal que profesa una religión pero que no vive como su gran prueba viviente que fue crucificado hace mas de 20 siglos. Si estará en tan desacuerdo con los que profesan en su nombre que no ha querido volver a aparecer para no apoyar la causa que dice defender ese Cardenal  que se atribuye alguna representación producto de las organizaciones internacionales creadas por el hombre.



¡Creá carpetas para todos tus correos! ¡Hotmail te da todo el espacio que puedas necesitar!

martes, 3 de noviembre de 2009

LA BATALLA POLÍTICA DEL LENGUAJE


   
LA BATALLA POLÍTICA DEL LENGUAJE
Por Hugo Presman 

El lenguaje es un campo de batalla demasiado importante para dejarlo en manos del adversario. El poder escritura determinados términos a su nombre, los da vuelta, se apropia de conceptos políticos del campo nacional y popular y los vacía de contenido. Renunciar a la denuncia y desenmascaramiento por la malversación política del discurso como método de ocultamiento, es empezar la batalla perdiendo. Otro subterfugio es acuñar conceptos falsos. Y luego protegerse detrás de los mismos. Como el tan mentado de periodista independiente. Se  autocalifica como tal aquel que toma distancia del gobierno de turno. Hay períodos en donde el gobierno y el poder coinciden. Fue el caso  de Carlos Menem o el de la dictadura establishment-militar. Pero hay otros que tienen enfrentamientos con sectores significativos del poder económico como ha sucedido, con diferente intensidad,  profundidad y orientación en gobiernos como el de Irigoyen(dos veces) , Perón ( tres veces) , Arturo Illia, Ricardo Alfonsín,  Néstor Kirchner y Cristina Fernández. Ahí gobierno y poder económico (en bloque o con segmentos del mismo), se enfrentan. Y entonces el periodista "independiente" cuando hace una crítica feroz del gobierno se ubica como independiente del mismo y resulta entonces vocero funcional y en algunos casos pago del poder económico. La relación de fuerzas entre el PODER ECONÓMICO y los gobiernos que los enfrentan total o parcialmente, es ampliamente favorable a los primeros. Por eso el periodista" independiente" que en estos casos se manifiesta como indefenso y víctima del gobierno, está omitiendo, o más claro mintiendo que lo protege el poderoso. El poder económico a quien nadie vota, tiene continuidad indefinida en el tiempo pero está detrás de las bambalinas, salvo cuando decide actuar sin intermediarios. Así todo no es lo que aparenta ser. Lo esencial no es visible a los ojos porque el contenido y prestigio que esconde la palabra independiente lo disimula. Hay márgenes de independencia pero no hay periodismo independiente.

DESGUACE Y TUPACAMARIZACIÓN

Durante los noventa el desmantelamiento del Estado fue denominado desde los sectores críticos a esa política como desguace o tupacamarización. La palabra desguace alude a devastar con el hacha un madero. Desmantelar un barco, de manera que quede solo el casco. A su vez la tupacamarización se refiere a José Gabriel Condorcanqui ( Tupac Amarú II) quien fue el artífice de la mayor sublevación anticolonial sudamericana del siglo XVIII. Derrotado se lo intentó descuartizar vivo atando cada una de sus extremidades a sendos caballos que tiraban en direcciones enfrentadas. Al no poder lograrlo, le cortaron la lengua y luego lo decapitaron. Una vez muerto lo despedazaron. Previamente tuvo que contemplar la ejecución de su esposa, de sus dos hijos, amigos y aliados. Los ganadores representaban a lo que en las historias oficiales se denomina civilización.

Estas imágenes atroces reflejan también vivamente lo que sucedió con el Estado, el modelo de sustitución de importaciones, y el exterminio de miles de argentinos.

En los últimos años hay una revalorización social del rol del Estado. Por eso desde los diferentes medios del grupo Clarín, durante la discusión de la ley de medios audiovisuales que los obliga a disminuir de alrededor de 260 medios a 10, en lugar de usar las denominaciones correctas de desmonopolización (caracterización política) o desinversión (caracterización económica) optaron inteligentemente por el de desguace. Intentaban así asimilar que se repetía ahora sobre un grupo privado los mismos procedimientos, ahora señalados como errores, que los privados realizaron sobre el Estado en los noventa. Si algún periodista  o político, usa la caracterización propulsada por Clarín, consciente o inconscientemente adopta el lenguaje que más le conviene al grupo.  

MATRIMONIO PRESIDENCIAL

Periodistas y políticos de todo el arco político suelen caracterizar el ejercicio de la presidencia como consumada por el matrimonio presidencial. Es llamativo que apóstoles del republicanismo y de la defensa de las instituciones no tienen empacho en desvalorizar el ejercicio del poder ejecutivo y llegar a considerar la presidencia como un bien ganancial. Es cierto que fue Néstor Kirchner quién más contribuyó con procedimientos impropios y desmesurados a producir una situación por lo menos confusa. Pero una cosa es hacer esa descripción en una análisis político de una situación poco frecuente, denominando como matrimonio presidencial una conducción, en algunos casos bicéfala, y muy otra reemplazar sistemáticamente el sustantivo Presidente por el de matrimonio presidencial. En el primer caso es válido como el intento de graficar un escenario, pero su reemplazo rutinario, deja de ser una caracterización para ser usada por quienes la aplican inveteradamente como una operación política de desprestigio de la que se es cómplice involuntario o agente activo.

CONSENSO   

Una de las expresiones políticamente correcta, es mentar reiteradamente la necesidad de concretar una política de consenso. Es cierto que en países desarrollados en los cuales se ha impuesto un modelo y el bipartidismo expresa un acuerdo económico y sólo hay diferencias sobre aspectos de la vida cotidiana o criterios de política exterior, fijar políticas de Estado consensuada resulta una tarea sencilla. Pero suponer que cuando se toman medidas o se sancionan leyes que afectan poderosos intereses se puede dirimir el conflicto de común acuerdo entre el que decide y el que sufre la decisión, es meramente la sustitución de los deseos utópicos por las patéticas miserabilidades de la realidad. Pretender sentarse a acordar con la complacencia de los sectores afectados, es desconocer como es el mundo económico real. Por ejemplo: suponer que Clarín negociará en una mesa de diálogo, el consenso de prescindir de 250 medios, o del gigantesco negocio del fútbol y todo el valor agregado de audiencia que potencia, es creerse el almibarado relato de una película filmada en Holywood. Es en términos periodísticos lo que expresó la brutalidad de Mariano Grondona cuando creyó que un programa equilibrado era sentar a polemizar en televisión  al torturador y al torturado (Miguel Echecolatz  y Alfredo Bravo) El divagador griego creía que esa era también una forma de acercarse al consenso, en este caso enarbolando las banderas del olvido y la reconciliación .

CRISPACIÓN

No se está dentro de la manada si no se hace mención, con reiteración y manifiesta preocupación de la palabra de moda: crispación. El diccionario lo define como enojar.  El gobierno es el principal acusado de crispar a la sociedad. Muchas veces lo hace en forma imprudente. Pero en la mayoría de los casos es consecuencia de medidas adoptadas que implican modificaciones. Como la resolución 125, la estatización de los fondos de pensión, de aerolíneas, la ley de medios audiovisuales, o la de la reforma política. Los cambios crispan a las sociedades. Fernando de la Rúa no tensionaba porque su inacción sólo originaba impaciencia. Como decía Hipólito Irigoyen: "Todo taller de forja parece un  mundo que se derrumba". Lo notable es que en la oposición Elisa Carrió, entre otros, pero como versión amplificada, realiza pronósticos apocalípticos, describe escenarios dramáticos, hace comparaciones inadmisibles y sin embargo nadie la acusa de crispar a la sociedad. Puede un día poner en duda la continuidad hasta diciembre de Cristina Fernández o anunciar una megadevaluación para después de las elecciones del 28 de junio. Y luego para bajar las consecuencias de sus anunciados cataclismos, sonríe, mira hacia los costados de las cámaras buscando el consentimiento de alguien a quién el televidente ignora, y luego muy suelta de cuerpo solicita que todos se queden tranquilos, que ella está magnífica y que después de los cataclismos, el paraíso será propiedad de los argentinos y le corresponderá ser la versión argentina de Moisés que conducirá  a la gente como ella a la felicidad. Aunque parezca broma o tal vez porque en realidad lo es, Carrió no es acusada de crispar a la sociedad.

POLÉMICO

Toda iniciativa es puesta bajo el paraguas de polémico. Su acepción es controversia. Así es polémica la asignación por hijo, es polémico la estatización de los fondos de pensión, la reforma política, el viaje de la presidenta a Honduras, la estatización del fútbol, la designación y las declaraciones de Maradona, la expulsión de Gorosito, es controvertida la clasificación para el Mundial de Sudáfrica, la intervención del Ministerio de Trabajo en el conflicto de Kraft, el matrimonio entre gay, las multas fotográficas, y los programas indescriptibles de Chiche Gelblung sobre la paternidad de Guido Suller.

Pero para los medios no es polémico el carácter oligopólico de la economía argentina, ni la concentración de medios en manos de Clarín, ni es controvertida la situación monopólica de Papel Prensa, ni los pronósticos inveteradamente equivocados de los gurúes de la City, o la televisación de una tribuna mientras en off se transmite el partido para aquellos que no pudiendo pagar el abono debían conformarse con el sonido sin imagen del partido. Polémico ha pasado a ser un lugar común para los analistas políticos como la palabra caos para los informadores del estado del tránsito.

EQUILIBRIO FISCAL TRANSFORMADO EN CAJA

Un viejo postulado del liberalismo es el equilibrio fiscal. Sin embargo gobiernos de ese signo raramente lo consiguieron. Para financiar los desequilibrios se endeudaron a niveles inmanejables. Hubo gobiernos de signo contrario que los déficit lo financiaron con emisión. El kirchnerismo hizo del equilibrio fiscal un rígido principio. Y los mismos que levantaban esta aseveración a nivel de sacramento, ahora lo minimizan y lo reducen a la calificación de "hacer caja", denominación bajo la cual se deduce, sólo puede perpetrarse negociaciones oscuras, dispendios incontrolables, sobornos y fraudes.

LA INFLACIÓN COMO FLAGELO

Cuando los gurúes y periodistas económicos plantean la inflación como un flagelo, es una manera de sacarle el cuerpo a la jeringa. De considerarla como una enfermedad de origen desconocido del sistema. O esconder las causas en explicaciones parciales. Dentro de ellas nunca figura que los sectores oligopólicos concentrados aumentan los precios aprovechando su posición privilegiada en el mercado. Es otra forma de descubrir tapando. El lenguaje como una barrera para acceder al conocimiento. El lenguaje como spam.  

LA BATALLA POLÍTICA DEL LENGUAJE

Hace 20 años caía el Muro de Berlín. Bajo sus piedras se sepultó la palabra pueblo y emergió "la gente". En la postmodernidad el ciudadano se convirtió en vecino como si fuera meramente un consorcista o un consumidor pasando a ser un ente económico amputado de su carácter político. El "periodismo independiente" calificó de paro un lock out patronal y denominó campesino a un pequeño propietario cuyo capital en la pampa húmeda supera el millón de dólares. La huelga, en el nuevo ángulo de observación, no se la mira desde el lado del trabajador sino del usuario. La destrucción de la legislación laboral se la envolvió bajo el eufemismo de flexibilización. La distribución del ingreso no sería consecuencia de políticas activas sino del desborde de la copa de los satisfechos. La teoría del derrame por el cual la prosperidad de los ricos produciría la mejoría de los pobres fue una adaptación moderna de Las fábulas de Esopo. Los aeropuertos y los shoppings son no lugares, el equilibrio fiscal proclamado como mandamiento por los liberales es meramente caja cuando lo hace un no liberal, la pobreza conmueve a los que la originaron y todo movimiento social será sinónimo de clientelismo. El tránsito siempre estará asociado a la palabra caos, De Ángeli a la "mesura" de los funcionales al Poder, el rabino Bergman a la sensatez y el Cardenal Bergoglio a las campañas de Caritas, loables pero  nunca calificadas de clientelismo religioso. Campo no es una definición geográfica, sino una inventada categoría política que remite a un escenario donde no hay controversia sino consenso, donde no hay intereses económicos diferentes sino armonía bucólica, donde no hay peones y trabajo infantil sino integrantes felices émulos de la familia Ingalls. Clientelismo será la forma de descalificar todo plan social, aunque el mismo no caiga en arbitrariedades en que incurren algunos de ellos. Asignar grandes cantidades de dinero entre pocos será considerado un incentivo a la inversión. En cambio, distribuir pequeñas cantidades a muchos, siempre llevará el estigma de clientelismo.     

Limpiar el idioma de los atropellos de los falsificadores, desvestirlos de sus imposturas, que la palabra comunique y no obstruya la comprensión, forma parte de la batalla política del lenguaje. Ahí donde se libra un combate más por la liberación. Tal vez uno de los primeros. Necesario, imprescindible para descubrir a los modernos  recreadores de la Torre de Babel

31-10-2009     

 
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS . Hugo Presman.   Para publicar citar la fuente


Puede visitar nuestro blog  http://www.presmanhugo.blogspot.com/

 



¡Revisá de un vistazo si tenés correos nuevos! Ingresá a tu Hotmail desde tu Messenger. ¡Probalo ahora!