Cuando de derecho se trata el conflicto, lo que nos sucede primero, es chequear si podemos acceder al mismo. Si el ejercicio nos da positivo,seguimos con nuestra cotidianeidad, pasando a otro tema.
En nuestra vida de todos los dias, convivimos en un estado permanente de acceso a derechos (tambien obligaciones) a los que accedemos con tanta naturalidad que en muchos casos ni siquiera registramos que se tratan de derechos.
Si por alguna razon, nos vemos privados de alguno de esos derechos tan naturalizados, seguramente una de nuestras acciones o pensamientos se orientaràn a revisar y recurrir a las leyes que nos garantizan los mismos.
Personalmente, nunca le prestè atenciòn a las dificultades que algunas personas por su elecciòn sexual podrian estar atravezando.
El debate al que por suerte nos estamos acostumbrando los Argentinos, hace que personas entre las que me incluyo, tengan que reflexionar sobre distintos temas que por por naturalizados , para muchos eran invisibles.
Este debate al que se ven obligados nuestros representantes elegidos democraticamente hace que maduremos como sociedad y en ese madurar tambien nos vayamos conociendo nosotros mismos, conociendo a quienes nos rodean y tambien a los que legislan sobre nuestros derechos.
Yo quiero agradecer a los legisladores y a los distintos actores sociales que desde sus diversas miradas y concepciones me han nutrido, algunos con sus saberes y otros con sus negaciones de la realidad. Realidad que se hace mas visible cuanto mas argumento se rebusca para negarla.
El debate hizo revisarme porque necesitaba saber de que lado habia estado antes. Antes formaba parte de la mayoria indiferente. Ahora, formo parte, en este debate, de los defensores del matrimonio igualitario.
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